Chris y la Packster 80: Entregas a domicilio en el hemisferio sur
15.02.2024 | Business
La gente de todo el mundo está haciendo de nuestras bicicletas una parte esencial de su vida. En este apartado nos cuentan su historia.
Hola, soy Chris McGorlick. Junto con mi compañera Lauren Salathiel regentaba una cafetería local en Yackandandah (Australia), en la que servíamos comida y aperitivos de producción local. Siempre andábamos a la caza de productos frescos de cultivo ético y de proximidad. Cuando vendimos la cafetería en 2019 nos pareció lógico que el siguiente paso fuera empezar a cultivar nuestros propios productos, tanto para autoabastecernos como para atender a otras personas de la comunidad conscientes de la importancia de la sostenibilidad y las cadenas de suministro locales.
Solo había un problema: ¡no teníamos tierra para cultivar! Afortunadamente, Yackandandah es una pequeña ciudad bastante progresista y con una sólida ética comunitaria, así que enseguida encontramos personas interesadas en nuestra iniciativa y en quince días un par de amigos habían puesto a nuestra disposición un espacio de su propiedad. Comenzamos a plantar en 2019 y recogimos nuestra primera cosecha hacia finales de ese mismo año.
Un huerto muy productivo
Nuestro objetivo es ser de ultraproximidad en toda nuestra cadena de suministro, por lo que sólo vendemos a personas de la localidad a las que podemos hacer entregas en bicicleta. Por lo general sólo vendemos a particulares, pero podríamos plantearnos vender también a empresas siempre que compartan nuestra filosofía de sostenibilidad y utilicen nuestra verdura de forma destacada en sus comidas, no sólo como una ocurrencia tardía para complementar un plato. De momento, el huerto es muy productivo y cultivamos un poco más de lo que vendemos. Por eso recientemente hemos puesto en marcha una pequeña tienda de honestidad en el mismo huerto para que el resto de la comunidad pueda acceder al excedente de producción.
Cuando empezamos los clientes venían a nuestra casa, en Yackandandah, a recoger las verduras. Durante el confinamiento por COVID empezamos a experimentar con entregas a domicilio en Cargo-Bike. Y hoy en día es así como la mayoría de nuestros clientes reciben sus productos frescos.
La Packster 80 fue la elegida
Llevábamos tiempo pensando en un medio de transporte, y cuando arrancamos con nuestro proyecto Happy Underground aparecieron otras necesidades y requisitos. La caja grande de las bicicletas con carga frontal nos va perfecta para llevar la mayoría de los artículos que necesitamos transportar, lo que incluye herramientas, compost y, por supuesto, ¡los productos frescos que entregamos a los clientes! Después de estudiar varias opciones, nos pusimos en contacto con Thijs de Sparque e hicimos una prueba con una bicicleta de demostración Packster 40 cuando estuvimos en Melbourne a principios de 2020. Después estuvimos dándole vueltas a lo que podríamos hacer con una bicicleta de esas características, pero necesitábamos una caja más grande que la que ofrecía la Packster 40.
Cuando apareció la Packster 80 hicimos la prueba durante un tiempo en Yackandandah del uso que creíamos que podíamos darle. El tamaño de su caja es perfecto para nosotros: caben 2 cajas de plátanos una al lado de la otra y podemos apilar hasta media docena, de modo que resulta muy eficiente. Optamos por el modelo vario con cambio progresivo Enviolo y correa de transmisión de carbono Gates para reducir la necesidad de mantenimiento y los componentes de desgaste. Si tenemos que llevar mucha carga utilizamos también el portaequipajes trasero para tener más espacio de almacenamiento.
Tenemos un firme compromiso con la minimización de nuestro impacto
Una vez que tuvimos la Packster nos dimos cuenta en seguida de que ya no le dábamos mucho uso a nuestra bicicleta normal, y menos con el remolque. Chris es quien suele utilizar la Packster. Si Lauren iba al huerto en su bicicleta y había que transportar varias cosas, casi siempre acababa dejándolas para que las llevara la Packster si decidía que el transporte podía esperar.
Finalmente, decidimos cambiar esa bicicleta también por una E-Bike, lo que equilibró la situación e hizo que llevar herramientas y otros artículos fuera mucho más factible en los 6 km de trayecto hasta el huerto, con algunas pendientes que te pueden dejar agotado. Las dos bicicletas funcionan con electricidad sostenible generada por nuestra instalación de energía solar. Solíamos hacer cicloturismo con regularidad hasta que llegó la pandemia por COVID. Nos encantaría volver a salir de excursión con nuestras bicicletas ¡y sería estupendo poder hacerlo con la Packster 80!