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#1 Frenado

Accione las manetas de freno varias veces y compruebe el punto de resistencia. ¿Puede accionarlas de modo que casi toca los puños? En ese caso, es probable que tenga que sustituir las pastillas de freno. Puede alumbrar las pinzas de freno desde arriba con una linterna. Así podrá comprobar el grosor de las pastillas a la derecha e izquierda de los discos de freno.

#2 Luz

Limpie los faros delantero y trasero con un trapo. Con la bicicleta encendida accione las dos manetas de freno y compruebe si responde la luz de freno. Verifique también que funciona la luz larga.

#3 Cubiertas

Compruebe periódicamente la presión de las cubiertas. Los valores óptimos de inflado vienen indicados en el flanco de la cubierta, en el color del panel lateral; por ejemplo, "27.5 x 62-584 2.0-4.0 BAR". Lo mejor es orientarse en torno a la mitad de los límites superior e inferior mencionados. De esta forma el neumático tiene suficiente aire, pero al mismo tiempo amortigua las vibraciones en terrenos irregulares.

#4 Radios

Asegúrese de que la E-Bike está apagada. Retire las baterías para mayor seguridad. Con la bicicleta sobre el caballete sujete los radios con las dos manos como si tocara un arpa y aplique un poco de presión con los dedos. ¿Nota diferencias notables en la tensión de los radios? ¿Hay algún radio que está flojo? En ese caso, acuda a un taller.

#5 Suspensión

Limpie los tubos de la horquilla telescópica con un trapo limpio. Puede sentarse en la bicicleta y comprimir la horquilla telescópica o los amortiguadores bajo su propio peso para comprobar que todo funciona como siempre.

Modelos touring (accionamiento por cadena)

#6 Mantenimiento de la cadena

En caso de que la bicicleta disponga de cadena, vale la pena realizar un mantenimiento periódico. Como regla general, cuanto más se limpie, menos costará hacerlo cada vez. Si la cadena está muy sucia, habrá que invertir más tiempo para limpiarla y dejarla como nueva. Cuando la bicicleta se moja, ya sea bajo la lluvia, la nieve o después de limpiarla, hay que secar todas las piezas del motor. Esta medida previene la formación de manchas de óxido. A continuación, conviene lubricar la cadena.

#7 Plato y casete

El plato delantero y el casete de piñones de la rueda trasera deberían estar lo más limpios posible. Para ello puede utilizar un trapo limpio, un cepillo y un detergente lavavajillas biodegradable. Aclare el detergente con abundante agua limpia y seque el casete con un trapo limpio.

#8 Ruedas dentadas

Compruebe si los dos ruedas dentadas situadas bajo el eje trasero funcionan limpia y girar con suavidad. Si es necesario, límpielos por ambos lados. Si la cadena se ha engrasado demasiado, la suciedad resistente se pegará a los rodillos. Un objeto no metálico puede ayudar en este caso, por ejemplo, una vieja palanca de plástico para neumáticos.

#9 Cadena

En caso de disponer de cadena, es importante que esta no se moje, ni se ensucie ni reseque demasiado. Se puede limpiar y secar con un trapo y después aplicar un poco de aceite para cadenas en la parte inferior con la biela en punto muerto. Una lubricación excesiva atrae suciedad, y esta puede dañar la cadena. Por eso conviene retirar el aceite sobrante con un trapo limpio. A continuación ponga todas las marchas para que el aceite se reparta bien entre todos los piñones.

Modelos vario (con correa de transmisión)

#10 Mantenimiento de la correa

La correa Gates prácticamente no requiere mantenimiento. Este sistema supone mucho menos trabajo que un accionamiento por cadena, pero tampoco hay que olvidarse por completo de él. Cuando es nueva, al principio hay que conservarla con un spray de silicona para que funcione con suavidad. Una limpieza a fondo ayuda a conservar la correa de transmisión en buen estado. La suciedad no afecta tanto a una correa como a una cadena, pero puede provocar un ligero chirrido, un claro indicio de que a la correa le falta lubricación y mantenimiento.